PARA PUBLICACIÓN INMEDIATA: 25 de abril de 2025
El abogado de Hamden, Christopher Donlin, recibe un premio estatal por su trabajo pro bono
(HARTFORD, CT) - El abogado de Hamden, Christopher Donlin, recibió el estimado Premio Pro Bono Glenn E. Knierim 2025 de la Oficina del Administrador del Tribunal de Sucesiones y los jueces de la Asamblea de Sucesiones de Connecticut en su reunión anual el 23 de abril en la Corte Suprema de Connecticut en Hartford.
El juez de sucesiones de Cheshire, Matthew J. Jalowiec, quien le entregó el premio al abogado Donlin, dijo que conoció a Donlin hace 14 años cuando era un joven optimista de ojos muy abiertos y lo vio crecer y desarrollar la capacidad de manejar casos complejos mientras experimentaba los altos y bajos de trabajar como abogado pro bono en los Tribunales de Sucesiones.
“Chris no solo es un firme defensor, sino también un luchador”, dijo el juez Jalowiec. “Defiende con pasión, celo y, sobre todo, compasión. Mantiene ese optimismo hoy en día a pesar de todos los obstáculos que el mundo le ha impuesto”.
El abogado Donlin es el fundador del bufete Donlin Law, especializado en lesiones personales y derecho sucesorio. Anteriormente, trabajó como abogado defensor para una importante aseguradora de Connecticut. Obtuvo su doctorado en Derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad de Quinnipiac en 2008.
Establecido en 2012, el Premio Pro Bono Glenn E. Knierim es otorgado anualmente por la Asamblea Testamentaria y la Oficina del Administrador del Tribunal Testamentario para reconocer el servicio pro bono ejemplar prestado por un abogado en el sistema de Tribunales Testamentarios. Este premio reconoce a personas como el abogado Donlin, quienes encarnan el espíritu de compasión y defensa.
Recibe su nombre en honor al difunto juez Glenn E. Knierim, quien fue el administrador del tribunal de sucesiones con más años de servicio en Connecticut, entre 1973 y 1989. También fue juez de sucesiones de Simsbury durante 32 años. Como administrador del tribunal de sucesiones, el juez Knierim trabajó para mejorar las leyes de adopción y tutela, creó el primer Código de Conducta Judicial de Sucesiones y estableció requisitos educativos obligatorios para los jueces de sucesiones.
Los 54 Tribunales Testamentarios de Connecticut y los seis Tribunales Testamentarios Regionales para Niños ayudan a miles de personas mayores de bajos ingresos a envejecer en sus propios hogares; supervisan el cuidado y las finanzas de quienes no pueden valerse por sí mismos; apoyan a personas con problemas de salud mental para que vivan en la comunidad en lugar de en entornos más restrictivos; y ayudan a miles de niños a permanecer en entornos familiares con familiares y amigos tutores en lugar de ser colocados en hogares de acogida. Los Tribunales Testamentarios ahorran a los contribuyentes más de $2 mil millones cada año al evitar servicios estatales más costosos. Para más información sobre los Tribunales Testamentarios de Connecticut, visite ctprobate.gov .
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